Tipo: Ruta Cultural
La Rambla es una de las ciudades que tiene como motivo de orgullo haber sido visitada por el insigne escritor, no sólo porque en el año 1587, cuando Miguel de Cervantes había sido nombrado comisario para el acopio y provisión de víveres destinados a las armadas y galeras reales, ejerció su cargo en nuestra localidad, sino también por su relación con el trinitario Fray Juan Gil, quien lo rescató del cautiverio en Argel y que aquí había predicado en diversas ocasiones en el convento de su misma orden.
Como prueba de estos hechos, quedó en el Archivo de Protocolos Notariales la firma autógrafa del propio Miguel de Cervantes, quien tuvo que ausentarse durante unos días a la ciudad de Córdoba, según algunos autores para resolver asuntos con la justicia eclesiástica, por lo cual otorgó un poder notarial a favor de su primo Rodrigo de Cervantes con fecha 28 de noviembre de 1587.
Según Francisco Serrano, el 20 del mismo mes, Cervantes había venido a La Rambla acompañando a Diego de Valdivia, Alcalde del Crimen de la Audiencia Real de Sevilla, para el repartimiento y la saca del trigo, tanto del Cabildo como, posteriormente, de la Iglesia.
Entre los meses de noviembre y enero del año siguiente, Cervantes hubo de visitar La Rambla en diversas ocasiones y sin duda, según el mismo investigador, el convento e iglesia de los Trinitarios dada la especial relación y gratitud que le unía a esta Orden, de la cual llevó el escapulario durante toda su vida, y porque la de La Rambla era la única de la diócesis de Córdoba, además de la de la capital.
